viernes, 30 de enero de 2009

Los padres separados piden “igualdad jurídica” y la custodia compartida de sus hijos

La delegación segoviana de la Asociación de Padres de Familia Separados celebró este miércoles, 28, en el Centro Cultural San José, su segundo encuentro en la ciudad para abordar las principales dificultades a las que se enfrenta este colectivo.El presidente de esta entidad, Pablo Herranz, manifestaba a Gente minutos antes del comienzo del encuentro que el principal reto al que se enfrentan los hombres separados es la relación con sus hijos y de éstos con las familias paternas y el incumplimiento de las sentencias en relación al régimen de visitas.
Por el momento, alrededor de una veintena de miembros constituyen esta entidad, a través de la cual se pretende orientar a los hombres que se encuentren o se vayan a encontrar en esta situación, tanto jurídica como psicológicamente.
El presidente de la entidad explicaba que la vida “te cambia rotundamente cuando te separas”, ya que “tengas la edad que tengas empiezas de cero y generalmente sólo”. “Dónde duermes, que haces, que buscas” se convierten en un reto, a la par que “buscas tener una vida digna”.En esta búsqueda, añadía Herranz los problemas económicos son una constante, ya que “con el trabajo que tenías tienes que buscar una nueva vivienda, coche y pasar la pensión a los hijos y en algunos casos a la madre”.
“Legalmente nos marcamos la meta de la custodia compartida para poder disfrutar de nuestros hijos y ellos de nosotros”. A estas peticiones se suman, añadía, la del divorcio directo, que las pensiones de viudedad correspondan sólo a la última mujer, la lucha para “evitar que nuestros hijos se queden huérfanos de padre y de la familia paterna”, en definitiva “la igualdad jurídica en los procesos de separación”.Además, desde este colectivo se solicita que se castigue con prisión el incumplimiento del régimen de visitas, al igual que el pago de las pensiones, así como la estimación por los jueces de los casos en los que las madres “separen a los hijos psicológicamente de los padres” y que se consideren delitos las amenazas y denuncias falsas.

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