
Desgraciadamente, la legislación actual deja abierta una puerta al abuso que, condimentada y amparada precisamente en esa sensibilización y persecución mediática, está desembocando en la interposición de dichas denuncias falsas, de modo que, movidos por un interés egoísta y sin escrúpulos en ocasiones se interponen denuncias que sólo persiguen la adopción rápida de una serie de medidas como la obtención de la custodia de los hijos, el uso del domicilio familiar, etcétera. Ha llegado el caso de solicitarse una orden de alejamiento y concederse por plazo de seis meses simplemente porque el ex marido miraba «con cara de psicópata» a su ex mujer cuando iba a recoger a los niños o le llamaba, según ella, demasiadas veces al móvil. Sin embargo, los medios de comunicación no se hacen eco de esta situación y poco o nada puede leerse o escucharse acerca de tales abusos. Y todo ello, bajo el amparo jurídico, que parece mirar hacia otro lado y no emplea, como debiera, todos sus mecanismos en perseguir dichos abusos.A ello hay que añadir, además, la enorme saturación que sufren los propios juzgados de violencia que, no sólo deben hacer frente al incremento de las denuncias que se ha producido en los últimos años, sino que igualmente deben conocer de las medidas civiles en los casos de separación o divorcio, lo que hace que, sin duda, la saturación sea mayor, toda vez que dicha materia debería ser conocida por los juzgados especializados de familia, para que sean éstos quienes con mayor rapidez, rigor y mayor conocimiento de los hechos puedan adoptar las medidas civiles adecuadas en dichos procedimientos.
Por tanto, es indudable que la actual situación debe ser corregida, como lo es igualmente que la lucha contra la violencia debe ser lo más enérgica pero a la vez lo más práctica posible para los ciudadanos. Deben establecerse todos los medios posibles y crear cuantos organismos sean necesarios para la erradicación de la violencia machista, pero igualmente no puede dejarse la más mínima puerta abierta al abuso, ante la gravedad de los hechos que se trata, así como la enorme importancia de las consecuencias que conllevan para el núcleo familiar y, desde luego, deberían los jueces perseguir cualquier abuso que se produzca en el seno de los malos tratos.
1 comentario:
Esta mala aplicación de la ley de violencia es muy injusta. Yo estoy desesperada, mi hermano esta en la carcel desde 5-10-08, acusado por su ex-mujer de denuncias falsas incluso de violación, el juez dice " como se va a inventar una acusación tan grave". Y cree su versión, cuando en los 23 años que duro el matrimonio fue ella la maltratadora. ¿Que podemos hacer para demostrarlo? Ayuda por favor.
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