lunes, 4 de mayo de 2009

«Estuve 13 meses sin ver a mis hijas»

José Manuel ha pasado por juicios, detenciones y, lo que más le duele, por el alejamiento de sus hijas de 9 y 5 años. En cuanto a los puntos de encuentro familiares, tiene un sentimiento agridulce porque, en muchos momentos han sido su único recurso para ver a sus hijas, pero también ha pasado por momentos muy duros, como su detención cuando iba a realizar una de esas visitas.

Sus problemas comenzaron hace cuatro años cuando presentó la demanda de separación. «Ella me dijo que me iba a hacer sufrir». En esos momentos no vivía en Extremadura y poco después, su mujer, se marchó sin avisar. Gracias a su abogada se enteró de que estaba en Extremadura con sus hijas y él se vino para poder ver a las pequeñas, pero tardó 13 meses en conseguirlo. «En esos momentos se te pasa de todo por la mente, nadie sabe lo que es eso».
En estos años, además, su ex mujer ha presentado numerosas denuncias por maltrato físico y psicológico contra él. Ha sido absuelto de todas e incluso ha logrado una sentencia contra ella por denuncia falsa pero sigue enfrentándose a los tribunales. «En estos momentos, no seguimos la Constitución, cuando a mí me demanda soy culpable hasta que demuestre mi inocencia y no al revés», explica José Manuel que, tras recordar con dolor todos los procesos judiciales, sonríe orgulloso al decir que ha conseguido tener una buena relación con sus hijas a pesar de todo.
En cuanto a los puntos de encuentro, su experiencia ha sido complicada. Por una parte, le han ayudado a que su ex mujer no pudiese incumplir el régimen de visitas, pero confiesa que la falta de intimidad es muy desagradable. Además, tiene una historia en este espacio que relata divertido aunque fue uno de sus peores momentos. «Fui a recoger a mis hijas y sólo me dijeron que no estaban y no sabían por qué. Me fui a la Policía a poner la denuncia, para que constase que mi ex mujer no se había presentado y me dijeron: '¡qué bien!, te estábamos buscando para detenerte'. Me había puesto otra demanda y en lugar de ver a mis hijas, dormí en el calabozo. También archivaron esa causa, pero ese momento no te lo puede compensar nadie».
Para José Manuel es fundamental que se invierta en mediación familiar «para no llegar a estos extremos» y da un consejo a cualquier padre que tenga que pasar por un punto de encuentro. «Ellos solo apuntan lo que ven, nada más. Tú puedes estar desesperado, pero no se van a poner de tu parte y mucho menos, lo de siempre, si eres el padre».
En conclusión, José Manuel está dividido en cuanto a los puntos de encuentro. «La sensación es asquerosa de por sí pero si hacen que veas a tus hijas, pues hasta los aplaudes, es lo que hay y es lo único que podemos hacer».

No hay comentarios: